La carga inalámbrica es producida por medio de una bobina emisora de energía que se encuentra normalmente en la base de carga, ésta genera un campo electro magnético donde la energía es transferida hasta la bobina receptora, la cual está ubicada en una lámina delgada en la parte trasera de los equipos. De esta manera, se realiza la transferencia de energía.
El prestigioso inventor y futurista Nikola Tesla en el siglo XX, se adelantó a la tecnología futurista, pues fue el pionero en introducir la carga por inducción (inalámbrica) cuando demostró con éxito la transferencia de energía inalámbrica. No obstante, esa tecnología con un siglo de desarrollo, encontró su camino para el uso del consumidor habitual.
En el 2015, la carga inalámbrica surgió en el espacio del mercado de electrónicos de consumo, principalmente bajo la forma de tres asociaciones estadounidenses con más de 100 firmas tecnológicas detrás de ellas. Wireless Power Consortium (WPC), Power Matter Alliance (PMA) y Alliance 4 Wireless Power (A4WP) han estimulado por años para que la industria adopte la carga inalámbrica como un estándar, lo cual se pretende lograr en año 2015, según datos de los consorcios PMA y A4WP, que en este año aúnan esfuerzos para empujar más la tendencia.
Actualmente, por su utilidad, esta tecnología se está integrando en todo tipo de dispositivos tecnológicos, equipos, espacios públicos, e incluso vehículos, a medida que las empresas buscan volver obsoletos los cables de energía y hacer realidad el mundo que imaginó Tesla.
Por otro lado, es pertinente mencionar a una de las empresas que se suman a este proyecto; Qualcomm ha desarrollado una tecnología llamada WiPower que permite transformar una superficie, en una zona de carga a través de radio frecuencias, con esta podrás alimentar simultáneamente varios dispositivos o dar electricidad a lámparas de luz diseñadas especialmente para no utilizar cables.
Asimismo, con la llegada de la carga inalámbrica como un estándar para las tecnologías del mundo, se verán afectadas las ventas de los cables cargadores, conectores y pilas externas, pues la adopción de esta tecnología requiere que fabricantes de electrónicos como Samsung, Sony, LG, Apple y otras, incorporen cambios en sus equipos para que puedan adaptarse a este tipo de recarga de forma ágil y sin accesorios auxiliares.
Sin embargo, los comercios, los aeropuertos y los restaurantes se ubican en un escenario de competencias en la adopción a los nuevos descubrimientos y usos tecnológicos. Por ello, están adoptando la idea de ofrecer enchufes o pilas portátiles a los usuarios para recargar los gadgets y ahora deberán equiparse de paneles o “pads” para recargar éstos de forma inalámbrica. Algunas de las cadenas que ya trabajan en la instalación de nueva infraestructura para carga inalámbrica son McDonald’s y Starbucks, según datos de las asociaciones PMA y A4WP.
Es necesario destacar que existen dos tipos de recargas:
- Recarga Electromagnética: Este tipo de carga es inductiva, utiliza un campo electromagnético para la transferencia de energía; se requiere de una estación, la cual manda la energía a las baterías de un dispositivo a corta distancia y requiere contacto con los dispositivos.
- Recarga por Resonancia: Este tipo de recarga se da a una distancia de 3-5 metros, en la cual se utilizan dos bobinas de cobre, una que hace el trabajo de enviar la energía, la cual contiene una fuente de poder y la otra va conectada con el dispositivo a cargar, la cual recibirá la energía. La transferencia de energía se da cuando las dos bobinas tienen la misma frecuencia y están cerca.
Para finalizar, es importante señalar que la duración de la batería no está relacionada a la forma de cargar los diferentes dispositivos; los expertos señalan que la persistencia de la batería varía de acuerdo con la configuración y el modelo del producto, las aplicaciones cargadas, las configuraciones de administración de energía del producto y los recursos utilizados por el usuario. Como ocurre con todas las baterías, la capacidad máxima de las baterías disminuye con el tiempo y el uso.
Fuente consultada: Chávez G. (2015, febrero). Se acerca la muerte del cargador como lo conocemos.