El nueve de febrero está previsto que dé inicio un nuevo ciclo lectivo, para que los estudiantes inicien sus labores de aprendizaje, según el calendario del Ministerio de Educación. Pero no sólo los útiles son importantes para que los estudiantes vayan seguros a recibir el alimento de la enseñanza. Un chequeo médico eficaz también cuenta para descartar o afrontar cualquier inconveniente de salud que pueda afectar el sano aprendizaje del discente.
Por lo oportuno que en nuestros días es este tema, la revista Familia y Finanzas presenta la opinión del Dr. Oscar B. Montiel Alarcón, especialista-pediatría.
El Dr. Montiel cuenta con 27 años de experiencia, y comenta que su vocación por la medicina con su especialidad, obedece al “amor a los niños, lo que significa, mantenerlos sanos y atenderlos con esmero”.
El pediatra, Oscar Montiel Alarcón considera “muy oportuno practicarle a los niños una serie de exámenes, entre ellos, el examen de sangre para asegurarse de que no padezcan anemia; afección que les hará sentir cansancio, se dormirán en el aula y tendrán falta de atención, lo que va a interferir en los estudios”.
La anemia es causada por un bajo nivel de hierro. El cuerpo obtiene hierro a través de ciertos alimentos. Una alimentación sin la cantidad suficiente de hierro es la causa más común. Los niños pequeños que toman leche de vaca pueden también volverse anémicos, sino consumen otros alimentos saludables que contengan hierro. Otras causas pueden ser incapacidad del cuerpo para absorber bien el hierro, aunque el niño esté consumiendo suficiente cantidad de este elemento.
Comer alimentos saludables es la forma más importante para prevenir y tratar la deficiencia de hierro. Las buenas fuentes de hierro abarcan: alimentos que se consumen en el Nicaragua, algunos mencionados por el médico son: pollo, pescado, fríjoles, semillas de soya, huevos, avena, uvas pasas y ciruelas pasas, verduras, entre otras.
Si una dieta sana no previene o trata el bajo nivel de hierro y la anemia del niño, el médico pediatra, recomendará suplementos de hierro, los cuales se toman por vía oral. Es importante señalar que los tutores deben evitar dar suplementos de hierro o vitaminas con hierro sin antes consultar con su médico.
Por otro lado, es importante señalar que el examen de sangre también pueden detectar los niveles de colesterol total, HDL (colesterol bueno) y LDL (colesterol malo), y triglicéridos a partir de los dos años de edad, sobre todo, si provienen de padres que han sufrido un infarto o tienen historia de colesterol alto. Incluso se les debe tomar la presión arterial a partir de los tres años si sus progenitores son hipertensos o han sufrido un accidente cerebral.
Agregó el doctor Montiel: – al iniciar las clases, los niños se deben someter a un examen pediátrico completo que incluya la evaluación física, es decir medir la temperatura y escuchar el corazón y los pulmones el interrogatorio de antecedentes, la realización de una antropometría (evaluación del crecimiento físico) para monitorear el peso del niño para compararlo con su altura. Esto se hace con el propósito de asegurarse de que el niño no pese más o menos de lo debido. Asimismo, debe incluir la revisión de la dentadura, esto con el fin de ayudar al desarrollo normal de los dientes, ya que en la infancia es cuando más se consume golosinas, si se presenta alguna eventualidad, remitirlo al dentista. Por otro lado, es importante revisar la vista y la escucha. Asimismo, el pediatra señala que otro aspecto trascendental en la salud de los niños es el control de las vacuna.
Las clases y la salud
“Las enfermedades más comunes son las infecciosas, tanto de origen viral como bacteriano, pero muchas pueden prevenirse si se respeta el calendario de vacunación”, afirmó el Dr. Montiel.
Luego, y específicamente en nuestro país, hay una elevada incidencia de problemas nutricionales por la falta de consumo de verduras, vegetales y frutas. Podemos identificar como frecuentes, las alergias y los problemas respiratorios crónicos y subagudos.
Por ello, es importante un chequeo del niño, aunque este no manifieste algún síntoma de enfermedad. Es decir la visita médica preventiva.
La edad y sus características
Con los años aparecen y cambian los riesgos de enfermedades y patologías. El Dr. Montiel explicó que en preescolar, por ejemplo, los pequeños están más expuestos al contagio de múltiples agentes, especialmente de virus. A partir de primer grado, la mayoría empieza a pasar más horas fuera de casa, rodeados de compañeros y con una mayor carga de actividades físicas e intelectuales, asimismo entre los 12 o 14 años, el deporte cobra más importancia, en algunos casos a niveles competitivos, motivo por el cual debe trabajarse sobre la prevención de complicaciones traumatológicas y cardiorrespiratorias para vitar secuelas a largo plazo.
El médico también examina a los niños según sus etapas de crecimiento, ya que los cambios pueden presentar cuadros de señal de depresión. Por ejemplo en la pubertad por que el adolescente experimentará, mientras crece y se convierte en adulto. En esta edad es necesario revisar la piel por si tiene acné. Podría ser necesario realizar exámenes de pecho y pelvis para las niñas y exámenes testiculares para los niños.
Por ello, es importante mencionar, que cada edad tiene desafíos propios a los cuales los pediatras y tutores deben anticipar.
